La nieve cambia todo en la Vuelta a Valencia

Pasa a menudo en el ciclismo. Te dispones a ver una etapa de montaña y, chas, la climatología hace que veamos un resumen de una etapa mutilada en su desarrollo por las duras condiciones climatológicas. Ha pasado mucho en la Vuelta a España a su paso por Asturias, en el Giro, en la París-Niza,en el Tour de Francia 1996 (llegada Sestriere, sólo 40 kilómetros que le sirvieron a Rijs para ponerse el maillot amarillo y no quitárselo...) y ayer en Valencia. Las imágenes del Campello hacían impracticable la subida final precedida de tres puertos. Al final, una etapa con dos puertos y mucha, mucha nieve. La diferencia en estos casos estriba en saberlo pronto, como ha sido el caso. Desde un primer momento el Fassa vió que Petacchi podía ganar la Vuelta, ha apostado por ello y salvo sorpresa este sábado el sprinter ganará la ronda valenciana, nada sorprendente dado que Freire ya ganó en Lucca en 2002, Baffi en Murcia en 1995 o Zabel en Andalucía en 1997. Los sprinters, a veces, tienen oportunidad de ganar rondas por etapas. Y este es el caso.

La etapa la ha ganado Flecha, completando el recital Fassa Bortolo. Y Mayo ha entrado 6º, en su quinto día de competición este año. Decía que quería ir ligero, no llegar al Tour pasado de rosca, pero al bueno de Ibán le carbura el motor muy pronto y no puede evitar estar delante, como ya le pasó el año pasado en País Vasco, donde acabó segundo. Aitor Pérez, del Spiuk, y Pellizotti, muy bien y delante: estaría bien que consiguiesen alguna victoria en las próximas semanas para confirmar el buen estado de forma. Sobre Flecha qué decir: ya gana en febrero, veremos a ver que puede hacer en abril. Ya forma parte de la burguesía del pelotón tras ganar en el Tour, en la extinta Copa del Mundo y nada menos que el Giro del Lazio. Veremos como se comporta en Bélgica con condiciones climatológicas un poco más suaves que las de ayer.