En la tierra de los canales y las caídas

En estos tiempos extraños que nos ha tocado vivir la bicicleta es símbolo de progreso y las clases acomodadas la adoptan como método de desplazamiento en los países avanzados. En esos países el coche pierde preeminencia y las carreteras se llenan de obstáculos a su velocidad y libertad de movimientos. El ejemplo es Holanda, país donde el Giro de Italia ha consumido sus tres primeras etapas.

En las calles de la capital de este país ejemplar en muchos sentidos se disputó el prólogo. Fueron ocho kms. y pico por la zona sur de Amsterdam, disputados en el tradicional clima del Mar del Norte: 9º grados, cielo gris y llovizna perpetua. La victoria fue para Wiggins por delante de un completamente desconocido corredor llamado Bookwalter, que marcó el mismo tiempo que su capitán Evans. Las diferencias entre los favoritos estuvieron dentro de lo normal y no hubo que lamentar ningún accidente.

A los escribas del gremio ciclista les encantó destacar la preeminencia de los corredores anglosajones y asimilados en los primeros puestos de la clasificación, cuando la noticia hubiese sido justo la contraria: que algún español (sólo doce partipantes en esta edición), italiano o francés se hiciese un hueco. Y si ganó Wiggins fue porque fue el mejor, el que más arriesgó y el favorito predestinado, sin más: esas energías gastadas en un ejercicio inútil de cuantitofrenia por cuestiones lingüísticas o de pasaporte en la clasificación irían mejor empleadas en saber que hace un inglés como Wiggins entre los primeros en una etapa de montaña, con su perfil de pistard.

Al día siguiente se llegó a Utrech en una etapa de más de 200 kms. donde el protagonismo fue para las caídas. Un pelotón de doscientos corredores ya sólo se junta en las grandes vueltas por etapas y alguna clásica, y entre su masa específica y la especifidad de las carreteras holandesas, explicada más arriba, el desastre estaba anunciado. Algunos favoritos, como Sastre, se dejaron en meta 37" con el nuevo líder de la general Evans, que recuperaba la maglia rosa ocho años después: no está mal eso de dos participaciones en la carrera y dos lideratos. La etapa fue para Farrar por delante del joven Goss y Sabatini.

Y hoy se ha llegado a Middelburg, en una etapa preciosa donde, gracias al helicóptero, se ha podido ver plasmado ese dicho inglés de Dios hizo la Tierra y los holandeses hicieron Holanda. Todo el tramo final de la etapa, disputada bajo una condiciones climatológicas envidiables, ha discurrido por la provincia de Zeeland, tierra ganada al mar mediante polders y gigantescas obras de ingeniería para achicar agua de un territorio que está por debajo de su nivel. Ahora luce próspera y atractiva, hace dos generaciones era lo que se puede esperar de una zona pantanosa e insalubre.

Para algunos ha seguido siendo un pantano. Los dos que han llevado la maglia rosa, Wiggins y Evans, se han visto implicados en caídas en una etapa que ha ido a ritmo de vértigo, no se sabe si para coger antes el avión en Ostende y volar a Cuneo antes de que la caprichosa nube volcánica de al traste con la excursión de este Giro. El inglés ya no sabía si reír o llorar (Vandevelde ha abandonado con la clavícula rota) y Evans se ha metido un palizón para intentar enlazar con el grupo cabecero.

En el primer paso por Middelbrug ha ido a tope en solitario hasta que ha conseguido enlazar con el grupo perseguidor, pero una vez ahí y con siete kms. para meta apenas ha obtenido la colaboración testimonial de Tondo y de un Millram (y eso que Gendermann iba por delante). De su equipo no había nadie, pero esta es una frase que voy a poder utilizar en todas las etapas de la carrera. Al final en meta ha recibido casi un minuto de desventaja con los principales favoritos. Su maglia rosa le ha vuelto a durar un día y pasa a manos de Vinokourov, silbado en el podio.

La etapa ha sido para Weylandt del Quick Step, un alegría para el equipo en una temporada especialmente adversa. El belga ha batido con bastante fuerza a Brown del Rabobank (de lo agotado que iba ha tenido que dejar de pedalear antes de cruzar la meta) y Forster del Millram. Greipel sólo ha podido ser sexto. Mañana etapa de descanso pensada para la organización, que ha obtenido un suculento éxito con la iniciativa holandesa.

Además del pecunario, la auténtica motivación, el público ha abarrotado el paso de la carrera, incluso más que durante el Tour de Francia. Esto se explica por varios factores: el más evidente es que, en un país con una densidad de 400 habitantes por km cuadrado, siempre va a haber gente y núcleos poblados. Pero también la amplia galería de actividades relacionadas con la carrera y una auténtica pasión por el acontecimiento deportivo: era muy frecuente ver al público que iba corriendo de un lugar a otro del recorrido para poder ver, siquiera otro segundo más, a los ciclistas. Hasta pronto Holanda, porque en dos meses sale el Tour de Rotterdam.

***
Ya nada tiene límites: Arribas hablando de la credibilidad en entredicho del ciclismo. Eso sí, mediante persona -tonto útil en este caso y los demás- interpuesta. Me pregunto qué parte corresponderá al de "están todos, menos Valverde" y el incapaz de ver durante años lo de 18. Valv. (Piti), o de laudar como un Rey Sol a A.C.

***

El periodismo de ciclismo está en sus mejores momentos, como se demuestra en esta crónica de El Correo, donde se da por hecho que Hushvod estaba corriendo el Giro de Italia sólo porque en las noticias del día salió lo de su caída entrenando.

***

Todo muy optimista. Habrá que volver con el tiempo a este artículo. El asunto se completa con este otro, más vicario.

***

Nueve meses después de su fallecimiento ya está lista la autopsia de Jarque. Atrás quedan las prisas por repatriar su cadáver, incluso intentando fletar un vuelo nocturno de un avión gestionado por el propio Durán i Lleida. Tantas prisas para que después pasen nueve meses y, con todo ya enterrado, sacar el parte informativo. Y eso que los resultados se esperaban para mucho antes. Que descanse en paz, aunque esto último es una obviedad: lleva en paz eterna nueve meses en los que nadie ha movido un dedo por saber la autopsia, ni por preguntarse para que existe y por qué se fundo Coverciano, el lugar del deceso. No se pierdan la última frase del enlace.
***
"Tenemos garantizado el uso de las infraestructuras deportivas para después de los JJ.OO"
***
El pasado viernes el Consejo de Ministros del Reino de España aprobó la modificación de la Quiniela para que parte de la recaudación se destine a garantizar el pago de jugadores profesionales. Las apuestas y loterías del estado -un impuesto sobre la pobreza y la estupidez- adoptan una nueva dimensión en este país de chanza y pandereta: distribuir la renta de los pobres entre los ricos. Brillante.