Páginas

10 julio, 2008

Cavendish, sin límites

Para algunos, la noticia de la etapa de ayer estuvo en el contubernio del asfalto y Francia, que echó a tierra a un corredor que besa el suelo con bastante frecuencia. Al menos esta vez no le esperó el pelotón, como en Caravaca 2004, otro hito señero de los Años de la Vergüenza. Chapa y pintura y a pedalear, ya ha dejado la crónica escrita para los palmeros.

Sin embargo, la noticia de ayer estuvo en el impresionante sprint de Cavendish. El jovencísimo británico no tiene límites aparentes. Lleva en forma desde abril, se ha tragado todo el Giro con dos etapas en el zurrón -y la que regaló a Greipel- y ahora, en el Tour, ha sacado una bicicleta de ventaja a todos sus rivales. En la etapa más larga. Encima, tiene fondo. A sus 22 añitos.

Que el maillot no les lleve a engaño. La foto es del pasado Giro. Ahora luce uno azul de nombre Columbia, un equipo que está dominando la temporada por el número de victorias y su calidad. En este Tour, del que llevamos cinco etapas, ya ha sumado una victoria, dos segundos puestos y un tercero. Hacía tiempo que no se veía un dominio así. Y lo que vendrá.

El antiguo T-Mobile -hace un año iban de magenta- funciona mucho mejor desde que se ha hecho cargo Bill Stapleton, sin parentesco con el antiguo manager del UsPostal. Ya saben que en el ciclismo eso de la rotación de personas y cargos está a la orden del día, pero no es el caso. Aquí se ha detenido en el color del nuevo Columbia, que se asemeja mucho al del antiguo equipo-robot, el de Padrnos escalador. Para más escarnio, hasta han colocado una banda amarilla en la bocamanga que recuerda al timo de la pulserita del Cowboy, un pilar fundamental de su fortuna.

Esto es lo que hay, ya lo saben. Aplaudamos todos al nuevo niño-prodigio, que a este ritmo alcanzará las 50 victorias antes de los 25 años, y recordemos como se alineó en primera fila en la presentación de la carta-UCI contra el dopaje, para sorpresa de propios y extraños. Va de capitán del nuevo ciclismo y de la nueva generación. Es simplemente casualidad, pero un británico no ganaba una etapa del Tour desde Millar, que iba bombadísimo. Ahora también va de apostol de no se qué zarandajas, probablemente de sus propios demonios internos.

Segundo en meta Freire, que reconoció que iba bien colocado pero que no fue el más fuerte. Es más: un impresionante Zabel estuvo a punto de remontarle. No hay muchas oportunidades para sprinters en este Tour diferente, y un ganador como el cántabro acumula últimamente muchos segundos puestos en esta carrera. En teoría, ya ha renovado por dos años con el Rabobank, en lo que será su último contrato. Se retirará con 34 años. Disfrutemos de los últimos años con un corredor insustituible, al que jamás se cita en esta campaña propagandística de La Edad de Oro del Deporte Español y que lleva nueve años a un nivel altísimo. Aunque le bata un mozalbete de 22 años. Los grandes campeones también se valoran cuando saben retirarse a tiempo. Como Induráin, el referente más cercano para Freire, que vio como le adelantaba un Trabant de la RDA. También tenía 22 años y se llamaba Ullrich.
***
La Arcadia sobre ruedas. Rivendel. El Valhalla. Shangri-La. La pluma engolada y mercenaria de Gómez Peña es capaz de hacer todo esto para hablar de un equipo que planta árboles, tiene botellines ecológicos y cinco victorias -5, five, cinque, fünf- esta temporada. El mismo equipo con una plantilla compuesta de enfermos, y donde ha dado positivo por EPO Ibán Mayo. ¡Que es un puto autobús, coño! Propaganda camuflada de información, igual que cuando escriben sobre dopaje.

Como todo se pega, otro que escribe igual -frases cortas, haikus de una línea, sentencias lapidarias- se apunta a la moda del publireportaje con indigestión de cultura. Bueno, de corta+pega de la Wikipedia. A mí no me cabe duda de que la mejor afición -también la más inocente- anida en el País Vasco, igual que no me cabe duda de que, leyendo lo que tienen, son bastante merecedores de lo que hay. ¡A cascarla!.
***
Aunque no sea habitual, magnífica columna de Horrillo.
***
"Varios ciclistas animarán a la gente a que done su sangre" Después me dicen que yo gasto un humor muy negro. En fin.